un espacio para los que viven sin manual

jueves, 8 de julio de 2010

mis gitanos verdes, y los sentires

"Dale limosna, mujer,
que no hay en la vida nada
como la pena de ser
ciego en Granada"
(Francisco Alarcón
)

En estos momentos me vienen a la mente los versos de Federico García Lorca:


Granada, calle de Elvira,
donde viven las manolas,
las que se van a la Alhambra,
las tres y las cuatro solas.

Una vestida de verde,
otra de malva, y la otra,
un corselete escocés
con cintas hasta la cola.

Las que van delante, garzas
la que va detrás, paloma,
abren por las alamedas
muselinas misteriosas.
¡Ay, qué oscura está la Alhambra!

¿Adónde irán las manolas
mientras sufren en la umbría
el surtidor y la rosa?
¿Qué galanes las esperan?
¿Bajo qué mirto reposan?
¿Qué manos roban perfumes
a sus dos flores redondas?

Nadie va con ellas, nadie;
dos garzas y una paloma.
Pero en el mundo hay galanes
que se tapan con las hojas.


La catedral ha dejado
bronces que la brisa toma;
El Genil duerme a sus bueyes
y el Dauro a sus mariposas.

La noche viene cargada
con sus colinas de sombra;
una enseña los zapatos
entre volantes de blonda;
la mayor abre sus ojos
y la menor los entorna.

¿Quién serán aquellas tres
de alto pecho y larga cola?
¿Por qué agitan los pañuelos?
¿Adónde irán a estas horas?

Granada, calle de Elvira,
donde viven las manolas,
las que se van a la Alhambra,
las tres y las cuatro solas.


Debajo de éstas banderas, con el cielo por testigo y La Alhambra por aliada, una pregunta fue hecha, y una respuesta dada.


(fotos del 2010)