Foto: Playa de Nerja. Andalucía: Octubre 2008 |
Tiene Manuel unos ojos muy oscuros, casi negros, orillados de aceituna como la sombra andaluza, aunque sus orígenes sean extremeños. Me ha explicado más de cien veces, que aunque cercano, no es lo mismo lo uno que lo otro, pero yo sigo escuchando su castúo tan similar al andaluz que no los termino de diferenciar. Tiene Manuel esas pupilas: dos saetas capaces de fusilar o volverse ese faro con el que quieres guiarte para siempre, cuando las lágrimas son irremediables. Tiene Manuel unos brazos que te estrechan sin dudarlo para que te refugies en ellos, para decirme ¡Ay mi niña, ¿qué no haría yo por ti?! Y una se pone a llorar mucho más, hasta calmarse, como resucitando. Unas manos que cocinan para el mejor paladar. Y esa generosidad que le cubre el alma, y que me la cubre a mí…
También, como todos, tiene sus días bravos, que son para olvidar. Tanto como yo.
Tiene Manuel esa magia que hace que mi risa brote intensamente, inmensamente (con nadie como con él). Me ha obsequiado cientos de veces, cosas que nunca podré compensar.
Tiene Manuel, además, ese dulzor madrileño que tanto me gusta a mí. Tal vez sea por eso que es tan caro a mi corazón ese lugar que habita y que habitará por siempre jamás.
Es como esos amores que se quedan en lo ideal, que no sufren decadencias, que no se echan a perder y que sólo han nacido para perdurar. Son ideales, sustantivos, de película. Te pueden llenar el corazón y robar el alma, pero no son para ésta tierra, porque son tan poderosos que en el día a día pueden llegar a asfixiar.
Son un milagro con el cual uno puede aprender que el verdadero amor es eso: dar y soltar, para volver a recoger, acaso un año después… unos días más tarde…unos meses adelante. De la estatura de lo perfecto, de lo eterno, porque lo eterno no es lo cotidiano. Eterno es lo que elegimos para llevarnos dentro al momento de partir. Para agasajarnos cuando estamos dispuestos a sintonizar, sin reclamos, con grandeza, con locura.
Dicen que las almas gemelas sienten de éste modo el amor. Que pueden tocar el cielo y el infierno con la misma intensidad, y que, si se encontraran, no pasarían los días de ésta vida pegados el uno al otro, porque sólo se resiste a la eternidad tomándola en copa pequeña. Es un amor soberano que incluye la soledad, el contacto de los cuerpos en el amparo de ser libres y al mismo tiempo ser uno solo. Es un vínculo que explica la etimología de la palabra a-mor, porque si amor es ausencia de muerte, entonces es inmortalidad. Es difícil estar a la altura de los acontecimientos en situaciones así. Es arrollador, es desbordante, es doloroso, e ineluctable y magnífico. Querer ponerle palabras es intentar definir lo sagrado. ¿Quien podrá?...
Como en los amores góticos, hoy confieso que he vivido la gloria y la pena de conocer el laberinto de la inmensidad. Benditos somos aquellos que lo podemos narrar.
Tiene Manuel, ese don… por eso hoy no intento escribir puntillosamente, en forma perfecta, ni revisar lo dicho. Hoy soy un borbotón, una espada que se fija en la piedra para perdurar. Hoy no ejerzo el oficio, ni pienso en quién me leerá. Hoy he abierto las compuertas de las emociones para gritar.
Yo que confié en las metáforas más sublimes, que busqué el adjetivo perfecto, el camino de la absoluta lucidez a la hora de contar, hoy soy un ventarrón, el ojo de un huracán, y también un simple lirio que trata de sobrevivir.
Hoy soy todas las mujeres que supe o pude brindar, más las que deseo ser, reunidas en ésta carta que lanzo a la mar, para que él la pueda hallar.
"Es como esos amores", quien es autoridad para desmentir un Amor ideal. Amor es Amor y si él no lo sabe, lo tendrá que aprender.
ResponderEliminarABRAZOS, Susana, los recursos están implícitos, son parte de la sangre, caen a borbotones sin que los podamos dominar. Lo suyo se disfruta.
http://enfugayremolino.blogspot.com/
Qué bello, Su. Me acabo de enamorar de los ojos de Manuel. Cuanto poesía.
ResponderEliminarCuánta nostalgia en esas palabras... estoy convencida de que esa carta ya ha llegado a "su playa".
ResponderEliminarUn placer leerte :) un abrazo
Una bella rosa poética , con elementos sublimes , la eternidad , el amor , las almas gemelas , el mar y la carta , bello amiga saludos
ResponderEliminarCoincido con Mariluz, esa carta ya ha llegado a su destino. ¡Hermosa prosa poética! Con qué delicadeza le cantas al amor bello, el de la entrega en los mejores y más valiosos momentos. Bien por ti que has comprendido el sentido de lo eterno.
ResponderEliminarUn placer leerte siempre. Un cariño grande.
No importa nada que el amor se distancie, ausente o dormite...
ResponderEliminarAhí está, por siempre.
Sin querer ejercer de escritora, has construido una entrada como un fabuloso canto al amor con amistad, lo que más perdura, lo que más acompaña y lo más incondicional en la relación de dos personas.
Un gran abrazo, Susana Inés!
Hola Su:
ResponderEliminarAnte todo, gracias...muchas gracias por tu carta. Que lindo es revivir tantas cosas y mas aun sentirlas. Acabo de recibir tu maravillosa carta y decirte que en verdad, asi lo pienso, el problema no radicaba en que la pudiese o no hallar. El problema estaba en que como remitente no sabias, hasta ahora, si era tu momento de enviarla o no. Ya veo que por fin ese momento te llego y me alegro inmensamente de que asi sucediese. Para todo existe su tiempo en esta vida tan hermosa y grande que tenemos por pasar.
De nuevo gracias... muchas gracias...
Manuel.
P.D: te comento que mi viaje, se aplazo hasta el lunes por motivos de disponibilidad, con lo cual estoy algo nervioso y angustiado como comprenderas.
Besos.
Susana, me ha encantado leerte, te diría muchas cosas , pero me quedo con una
ResponderEliminar«Amor es la ausencia de la muerte» es más no hay muerte porque no lo ha matado el pecado. El amor es lo único que perdura en la eternidad.
Gracias.
Pásate por mi blog el día 27 de Junio, lunes, hay un premio a la amistad,con motivo de mis 60 años, deseo sea de su agrado.
Con ternura
Sor.Cecilia
lograr emocionar el alma de otros solo se consigue cuando uno logra emocionarse del mismo modo... eres grande amiga...
ResponderEliminarPrecioso,yo que soy una persona muy visceral y muy pasional,me he adentrado en este laberinto de sensaciones y emociones y te he entendido a la perfección.....Eso es muy bueno Susana,es muy bueno a veces de no utilizar sutilezas y medir las palabras,a veces se hace necesario convertirse en huracan y arrasar todo,ser fuego para dar el calor necesario a la frialdad de la vida,ser mar y desbordarse por completo,por que es una magnifica forma de sentir que tocamos el cielo y de saborear nuestra libertad como si fuese el último dia de nuestra vida,es una gozada para nuestros sentimientos,es una manera de llenar el corazón de grandiosa belleza.....
ResponderEliminarDesde Andalucia...Saludos y que los hados nos sean mágicamente favorables....Un beso Susana.....La Vampiresa
Susana por casualidad acbo de leer el aviso que tienes aquí en tu blog....Decirte desde mi corazón,que siento en el alma lo de tu madre,espero que estés lo mejor que puedas estar en estos duros momentos,desde aquí te mando todo el calor y cariño del mundo para que así sea......Sabes? A mi la vida también me arrebató a mi padre cuando yo era una jovencita...desde aquel entonces,sé por muchas razones,que esas personas que tanto nos han querido y nos han cuidado ( y nosotros a ellos) No se van del todo,se quedan a nuestro ladito en forma de ángeles,para seguir cuidandonos,para seguir protegiendonos y para seguir brindandonos su eterno amor.....
ResponderEliminarDe veras que lo siento...Un beso enorme y ánimo.....
La Vampiresa, te agradezco de todo corazón tus palabras. Yo también creo, sinceramente, que se convierten en seres de LUZ y nos protegen y guían. Una de las cosas que considero total y absolutamente cierta es La Trascendencia. Me quedo con el beso y con el animo de buena gana. Yo también te envío un beso y un cariño enorme.
ResponderEliminarConocí tu blog recientemente, me detuve en este texto, lo leí, volví a leerlo y he vuelto de nuevo buscándolo; siento lo que narras y me identifico con esa forma de amar. Escribes muy bien y expresas de maravilla una forma de querer que solo sabe quien lo ha sentido.
ResponderEliminarUn saludo desde tierras extremeñas, cercanas a las andaluzas y con muchas semejanzas en costumbres y acentos.